Está demostrado. Cuando quieres leer una novela pasa que debes estudiar. Cuando quieres comer pasa que no hay comida. Y cuando quieres hacer deporte al aire libre pasa que el tiempo se pone cabezón y no te deja. Así llevamos meses en la zona de Madrid. Es ya agotador el tiempo tan desapacible que estamos sufriendo. Llegas a casa y miras al cielo, y piensas que puede caer el diluvio o no hacerlo. Entonces piensas hay que intentarlo, pero sales a la calle y notas una brisa que al final se convierte en un viento molesto, racheado. Al final acabas tirando una moneda al aire y te lo juegas todo a cara o cruz.
Eso hice y salió cara. Tocaba salir sí o sí después de varios intentos frustrados. Salí y no acabó mal la cosa puesto que no llovió, que a mi modo de ver, es lo peor que puede pasar estando encima de la bici y a unos cuantos kilómetros de casa. Sufrí el viento racheado, aunque sí hay que decirlo, no ese tipo de viento que te hace pensar que era un día para haberse quedado en casa, tumbado en ese sofá cómodo que tenemos frente al televisor. La temperatura ya al alza daba a entender que me podía desprender definitivamente de las ropas de invierno, pero menos mal que no lo hice, puesto que el viento algo húmedo, hacía encogerse hasta al más machote.
Salí de casa con muchas ganas, todas las acumuladas durante este invierno del que apenas estoy disfrutando sobre ruedas. Había que hacer todo asfalto porque la lluvia no da tregua últimamente. No había que jugársela en los lodazales que forman estas tierras tan arcillosas. Subí el pueblo y alcancé pronto Villanueva. Allí, giro a la izquierda para hacer toda la recta con sube y bajas. Encontré de cara el viento y ese tramo se me hizo laaaaaaaaaaaargo, aunque bien sabía que si estaba en una ruta circular, lo que el viento me quitaba en ese momento más tarde me lo daría. Bajé el puerto de Valdeavero con cuidado, porque al entrar el viento de costado en algunos puntos hacía poco estable la bici. Giro a la derecha y hacia Torrejón del Rey para encarar la N320. Buen tramo de rodaje sin dejar de notar el viento por todos lados. Quer, Alovera y Azuqueca. En general, las sensaciones fueron las que esperaba. Nada especial, ni demasiado agotado ni demasiado sobrado.
El tramo final Azuqueca, Villanueva y Meco se me hizo cuesta arriba, porque encontré de nuevo viento de cara y el frescor se empezaba a notar más. Llegar a casita y darse cuenta que se ha aprovechado la oportunidad al máximo hace sentirse muy feliz. Vamos a ver si podemos trasladar este día a muchos más y de forma muy continua.
Datos de la ruta:
Recorrido: Meco - Villanueva de la Torre - Valdeavero - Torrejón del Rey - Quer - Alovera - Azuqueca de Henares - Villanueva de la Torre - Meco.
Distancia: 41,33 km.
Tiempo efectivo: 1h43'
Tiempo total: 17:15 - 19:30
Promedio: 24,10 km/hora.
Desnivel: 330 metros.
Terreno: pista-asfalto (0-100) %.
No hay comentarios:
Publicar un comentario